Durante mucho tiempo tuve ganas de dedicarme a lo que me apasiona... así nace Sonríe Siempre porque lo que quiero es simplemente sonreír, sonreír todo lo que más pueda.

Fueron muchos años de trabajar en mí, de conocerme. Eso me llevó a estudiar flores de Bach, medicina natural y a hacer un camino más saludable en mi vida. Creo en el poder curativo de las plantas y, cuando descubrí los tintes naturales, encontré una explosión de armonía.

Cuando preparo los tintes, los olores transforman la cocina y siento que estoy en un bosque encantado. Nada como esa sensación de plenitud que hace que todo valga la pena. Aprendí a tener paciencia y respeto; y sobre la importancia de saber cuidar el proceso para llegar a lo que se desea. Sí, amo todo lo que sea creativo, artístico, hogareño, natural…. Esta técnica ancestral se convirtió en un gran complemento de mi vida, porque coincide en como yo cuido este mundo.

Me gusta cuidar cada uno de los procesos, respetando la naturaleza y con responsabilidad social.
Y acá estoy sonriendo feliz, amando cada momento de mi nuevo trabajo: el oficio de teñir telas...